El número de páginas, ¿la cantidad importa?

Por Adriana Ortega y David Cerón / Mayo 19, 2022

¿Un metadato tan sencillo como es el número de páginas que forman un libro puede estar relacionado con el incremento en las ventas de un título?

Un metadato que, a simple vista podría considerarse poco relevante, como lo es la paginación de los libros, nos da pistas sobre si el total de páginas que constituyen un título es un factor crucial en la decisión que toma un lector para comprar o no un libro.

Descritas en el Diccionario de la lengua española como, cada una de las dos planas de la hoja de un libro, las páginas que forman la estructura y la organización de un libro deben atender a criterios de funcionalidad antes que a tendencias estéticas. El número de páginas ha sido considerado incluso en la definición de lo que puede ser considerado como “libro”. En una tentativa de normalización internacional, la Unesco ha definido al libro a una publicación impresa no periódica que consta como mínimo de 49 páginas, sin contar las de cubierta; si esta cantidad va de las 5 a las 48 páginas se identificará como folleto.

Desde el punto de vista del lector, el número de páginas podría ser un factor relevante en la elección del siguiente libro que va a leer. Gracias a este metadato puede identificar si está ante un libro extenso o frente a una lectura breve que no le tomará más que un par de horas y unas cuantas tazas de su café favorito.

"Los libros más vendidos nunca han sido tan cortos"

Recientemente, WordRated, una organización estadounidense sin ánimo de lucro realizó un estudio en el que analizó 3444 de los títulos de tapa dura que ocuparon los primeros tres puestos en las listas semanales de libros más vendidos o libros superventas de The New York Times desde 2011 hasta 2021 para examinar cómo ha cambiado la longitud de los libros más populares a lo largo del tiempo. Se analizaron tanto títulos de ficción como de no ficción y se dividieron en libros “largos” (más de 400 páginas) y “cortos” (menos de 400 páginas).

Los principales resultados que arrojó este análisis son los siguientes:

  • Los bestsellers son cada vez más cortos: la longitud media de un libro enlistados en la clasificación de lo más vendidos del NYT ha disminuido en 51,5 páginas de 2011 a 2021, pasando de 437.5 a 386 páginas en promedio (11.8%).
  • La publicación de libros “largos” se ha reducido en un 30 % a lo largo de 10 años; del 54% en 2011 al 38% en 2021.
  • Los libros “cortos” se quedan más tiempo en la lista de los más vendidos: Los libros largos permanecieron 4,4 semanas más en la lista de los más vendidos que los cortos hasta 2016. Desde 2016, los libros cortos han estado en la lista 1.9 semanas más que los libros largos.
  • La gente lee libros más largos durante el invierno: los libros más vendidos de octubre a marzo tienen en promedio 35 páginas más (427 páginas) en comparación con los títulos vendidos de abril a septiembre (392 páginas); un 8.2 % de diferencia entre cada periodo.

Los creadores del estudio atribuyen el auge de los libros cortos a que, en la era digital, la variedad de oferta de contenidos es una de las razones por las que el tiempo de lectura está disminuyendo con los años. Según esta lógica, los lectores están optando por comprar libros más cortos que les faciliten tener un espacio para la lectura dentro de este ajetreado mundo.

Sin embargo, podríamos hablar de otros factores: un libro corto es más barato de producir y transportar, factor que resultará quizá más relevante ante el encarecimiento del papel y de los fletes tras la pandemia. Al mismo tiempo, para comprender el fenómeno a cabalidad, necesitaríamos estadísticas no solo por género y subgéneros (WordRated no hizo distinción entre títulos de ficción y de no ficción para su estudio), sino por edad recomendada e, incluso, por lengua de origen. Es bien sabido que la traducción de una novela larga es un lujo que no todas las editoriales se pueden permitir.

Cabe preguntarse también cuáles son los hábitos de lectura en otros formatos como, por ejemplo, con libros electrónicos de diseño ajustable, en donde el número de páginas es dinámico, y depende de factores como las dimensiones del dispositivo, la orientación de la pantalla o el tamaño de letra que decide el lector.

¿Y en México?

Utilizando la información almacenada en Metabooks, nos dimos a la tarea de saber si en el mercado mexicano predominan los libros impresos “cortos” o los “largos” en términos de producción. Para ello, se tomó en cuenta solo aquellos libros publicados entre 2011 y 2022, y que su temática general fuera ficción.

En total, se obtuvieron 2500 títulos que cumplían con los criterios de búsqueda antes mencionados y de los cuales, 70% registran un número de páginas menor a 400, mientras que el 30% restante tiene un número entre 405 a 990 páginas. Con base en estos resultados, la longitud promedio de los libros impresos activos en Metabooks con código BISAC FIC000000 (Ficción/General) es de 347 páginas. Es decir, en el mercado mexicano predominan los libros “cortos”, según el criterio de WordRated, al menos para la ficción.

Si bien el número de páginas no es un factor determinante para el éxito de ventas del libro, este tipo de análisis sencillos nos indican ciertas tendencias que los editores podrían considerar en las decisiones de planeación de su catálogo. Esperamos que en un futuro otros estudios más profundos para nuestro y otros mercado nos ilustren al respecto.

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